A LIBERTAD NOS LLAMÓ EL HIJO
PASTOR GENERAL ANTONELY RODAS
IGLESIA CRISTIANA GENESARET
MARTES 19-01-10
La mente natural le cuesta entender las verdades del Reino de la luz, la escritura nos enseña que el príncipe de las tinieblas es el que ha cegado el entendimiento para que haya incredulidad y no resplandezca la luz del evangelio de la Gloria de Cristo, (2Corintios 4:4).
La Iglesia de Cristo tiene que ejercer la autoridad y el poder para no dejar de anunciar las Buenas Nuevas de Salvación, no con armas carnales, sino con las que son poderosas en Dios para destrucción de fortalezas, argumentos, y toda altivez que se levante en contra del conocimiento de Dios y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia de Cristo, (2Corintios 10: 4-5).
Para así cumplir con la voluntad de Dios que nadie se pierda.
El siguiente texto que vamos a compartir nos habla de la controversia que tuvieron ciertos judíos que habían creído y que el Señor Jesús les dijo que para ser verdaderamente sus discípulos tenían que permanecer en su Palabra para que conocieran la verdad, y que la verdad los haría libres, y los judíos muy molestos reaccionaron con una mente natural, que nunca habían sido esclavos, no entendieron que el Señor se refería a una esclavitud espiritual.
Juan 8:34-35 RV60 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. (35) Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.
En el tiempo de hoy muchos son esclavos dentro de la casa y fuera de la casa, éste mensaje es una exhortación para que vengamos a la plenitud de la libertad por medio de Cristo Señor nuestro.
• Ser esclavo dentro de la casa, implica que no haya vínculo natural como familia de Dios
• La estancia es insegura, inestable, en cualquier momento será arrancado
• La relación del hijo es un vínculo natural, que implica seguridad, estabilidad y permanencia eterna.
Hoy el Señor también le habla a toda persona que está fuera de la casa, para que forme parte de la Familia de Dios, para que deje de practicar el pecado y deje ser esclavo del diablo.
1Juan 3:8-9 RV60 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. (9) Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
El Señor Jesús no solo vino para salvarnos y perdonarnos de todos nuestros pecados sino que al creer en Él nos restituye de todos los derechos que tenemos como hijos de Dios, nos convierte en coherederos juntamente con Él.
Gálatas 4:7-8 RV60 Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo. (8) Ciertamente, en otro tiempo, no conociendo a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses;
Tremenda es la Palabra cuando se discierne en el espíritu, por favor ponga atención a lo siguiente:
• El que no conoce al único y verdadero Dios, es esclavo y sirve al diablo y a sus huestes.
• La escritura se refiere al diablo como el dios de este siglo, (2Corintios 4: 4)
• Cuando la escritura se refiere que por ignorancia se sirven a otros dioses, no solo se refiere a los ídolos hechos por manos de hombres.
• Son huestes perversas que actúan como espíritus de codicia, avaricia, ambición, lujuria, alcoholismo, drogadicción, mentira, contienda, celo, adulterio, lascivia, pereza, robo.
SERVIR: Significa entregar toda la voluntad, esfuerzo, capacidad, a alguien
Recuerde que el que practica el pecado se convierte en propiedad del diablo
Estimado amigo(a)
Como puede usted darse cuenta que su voluntad está rendida en esclavitud al pecado, con tan solo que en su vida se de una de las premisas siguientes:
• Si todo su tiempo y su vida la dedica a su trabajo
• Se duerme pensando en como ganar más dinero, y lo que va a hacer con el
• Se levanta con el solo pensamiento de progresar, y triunfar en sus metas terrenales
• Siente sumo placer en los deleites que ofrece este mundo, (deportes, cine, televisión)
El deseo de nuestro Dios es hacerlo libre de la esclavitud de pecado, hoy es su oportunidad si está en la casa o fuera de ella y reconoce a Jesucristo como su Señor, será libre.
Juan 8:36 RV60 Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
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